La tendinitis, una preocupación prevalente entre los culturistas, emerge como una inflamación en los tendones debido a una sobreexertación, a menudo resultando en incomodidad y dolor. Estas lesiones suelen surgir cuando hay un cambio repentino en el patrón de entrenamiento, la intensidad o la duración. El trauma microscópico de estos cambios puede inducir a la inflamación y la degeneración celular, lo que lleva a esta condición.

Un aumento significativo en la fuerza es evidente con el uso de esteroides, una opción popular entre algunos en la comunidad de fitness. Si bien los músculos pueden adaptarse rápidamente a esta nueva fuerza, los tendones se quedan atrás. La disparidad puede causar varias lesiones, que van desde inflamaciones leves como la tendinitis hasta graves como las rupturas de tendones.

Aunque la tendinitis puede afectar cualquier articulación, principalmente se dirige a los hombros, codos, muñecas, rodillas y tobillos. Si alguna vez has sentido un tirón en estas áreas después del ejercicio, podría haber sido una señal.

Tratamientos Convencionales para la Tendinitis

  • AINEs: Estos son medicamentos antiinflamatorios estándar como la aspirina o el ibuprofeno. Sin embargo, pueden obstaculizar la respuesta de recuperación natural del cuerpo después de los entrenamientos.
  • Protocolo RICE: Ideal para algunos, pero el descanso puede no ser factible para todos debido a los compromisos diarios.
  • Terapia de Ultrasonido: Esto utiliza sonidos de alta frecuencia para localizar y disolver tejidos dañados, fomentando la curación.
  • Corriente Interferencial: Un método prevalente para abordar el dolor crónico y la inflamación mediante la estimulación de músculos y tendones.
  • Masaje de Fricción Cruzada: Una técnica de tejido profundo que apunta a los tendones y ofrece alivio.
  • Acupuntura: Una práctica ancestral que podría mitigar los síntomas de la tendinitis.
  • Inyecciones de Cortisona: Para el dolor persistente o agudo, los médicos pueden administrar cortisona cerca de la articulación para reducir la inflamación.
  • Cirugía: Una opción de último recurso debido a su naturaleza invasiva y el tiempo prolongado de recuperación.

A pesar de la variedad de tratamientos tradicionales, aproximadamente una cuarta parte de los pacientes no encuentran alivio. Una alternativa emergente aprovecha el aspecto excéntrico del entrenamiento con pesas. Este enfoque implica realizar el movimiento hacia arriba (concéntrico) con ambos miembros, pero permitir que el miembro afectado maneje la fase hacia abajo (excéntrica) en solitario, con el peso ajustado a la fuerza de un solo miembro. Aunque inicialmente puede ser doloroso, con el tiempo, este método ha demostrado aliviar el dolor y restablecer la fuerza del tendón. Por ejemplo, un estudio de Suecia destacó que los atletas con tendinitis de Aquiles informaron una reducción drástica del dolor (de 81 a 4 de cada 100) en 12 semanas, recuperando casi el 95% de la fuerza original del tendón.

Conclusión:

Si bien la tendinitis puede obstaculizar gravemente el viaje de fitness de alguien, existen varios tratamientos, tanto tradicionales como alternativos. El método excéntrico parece prometedor, pero es esencial consultar con un profesional de la salud antes de intentarlo. Independientemente del tratamiento elegido, la intervención temprana y la toma de decisiones informadas son cruciales para una recuperación rápida.